martes, 19 de junio de 2012

La mala vida de los médicos

La mala vida de los médicos
Martes, Junio 19, 2012 | Por Jose Antonio Fornaris

LA HABANA, Cuba, junio, www.cubanet.org -En Cuba, es clásico ya el
chiste sobre el borracho con delirios de grandeza que dice ser portero
del Hotel Nacional, pero en realidad es un simple cardiólogo o
neurocirujano. El chiste quizás solo resulte comprensible para los
cubanos, que sabemos perfectamente que en este extraño país es mucho más
elevado el nivel de vida de cualquier persona con educación básica, que
trabaje en el area del turismo, que el de un eminente medico especialista.

Waldo es pedíatra, su salario mensual es de 573 pesos (menos de 23
dólares). Recientemente falleció su mamá, a los 94 años. Dentro de la
pena que sentía, hizo un balance de su vida, y se detuvo en lo que había
logrado obtener con su salario, tras casi 40 años de estar ejerciendo la
medicina.

"Me sorprendí –cuenta Waldo-, porque me di cuenta de que lo único que he
logrado adquirir es un sillón de aluminio, de esos que se ponen en el
portal, que compré cuando estuve haciendo trabajo social en Isla de
Pinos, y la bicicleta china. Todo lo demás, incluyendo la casa, fue
comprado por mis padres antes de la revolución. Papá trabajaba en la
Compañía Eléctrica, primero, como obrero, y luego, como jefe de brigada.
Y mi madre trabajaba como pantrista en una clínica privada".

Waldo ya tiene edad y tiempo de trabajo suficientes para jubilarse, pero
no lo hace porque: "Voy a ganar mucho menos. Además, estoy esperando, a
ver si logro que mi instalen un teléfono en la casa. Si dejo de ejercer,
creo que nunca voy a tener un teléfono. Ahora al menos tengo la esperanza"

El suyo, es más o menos el cuadro de la mayoría de los galenos en Cuba.
A muchos se les ve salir diariamente de los consultorios con una bolsa
entre las manos. En ellas llevan algún regalito, casi siempre alimentos,
que los pacientes les han dado. Si no fuera por esos pequeños regalitos
de los agradecidos pacientes, muchos medicos pasarían hambre.

La miseria es también la razón por la que muchos tartan de que los
envien a cumplir "misión" a otros países. Por regla general no les
importa para dónde, el asunto es salir al extranjero. Algo que les da la
oportunidad de ganar un poco más de dinero y de traer algunas cosas para
sus familias.

Con tan hostil y frustrante situación y un futuro incierto, no es
sorpresa par nadie que algunos, a pesar de la separación de sus familias
que quedan como rehenes del gobierno en la Isla, aprovechen la salida al
extranjero para cruzar alguna frontera y solicitar asilo en cualquier lugar.

A pesar de la poca remuneración y de sus vidas miserables, los mayoría
de los médicos cubanos son muy humanos, excelentes y dedicados
profesionales capaces de hacer Milagros con los rudimentarios medios a
su alcance, hospitals en ruinas y casi sin medicamentos que recetar a
sus pacientes. Sería justo y razonable que el Estado cubano diera a
nuestros medicos el reconocimiento y la compensación que merecen y
dejara de utilizarlos como mano de obra semi esclava para alquilarlos a
otros países con fines propagandísticos y financieros.

Supuestamente la educación en Cuba es gratuita y los médicos, como otros
graduados universitarios, no pagan ni un centavo por sus estudios. Me
pregunto hasta qué punto es eso cierto, si después de graduarse un
medico debe trabajar toda su vida para el Estado por menos de un dolar
diario.

fornarisjo@yahoo.com

http://www.cubanet.org/articulos/la-mala-vida-de-los-medicos/

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